El sábado una amiga
nos invitó a pasar su cumple disfrutando de una escapada al campo. El lugar se
lo había prestado otra conocida de ella, lo cual fue un gesto lindísimo porque
fue un festejo original y súper agradable.
Parte del parque |
La verdad es que salir
de la ciudad y estar en contacto con la naturaleza hace bien.
Ver plantas y
animalitos es un perfecto quiebre a la rutina.
Uno de los cachorritos |
Además mi amiga tuvo
la suerte de que el clima fuera apropiadísimo para la ocasión. Juntó familia y
amigos y fue una celebración a lo grande.
Llegamos cerca del
mediodía y ya había una mesa grande colocada bajo un árbol de tilo servida con
cosas ricas. Empanadas para empezar, sándwiches de carne y choripanes para
seguir.
¡Una mantis! |
Nos rodeaban unos cachorritos
de solo un mes de vida que eran una divinura.
También había varios gatitos,
gallinas, lechuzas, un gallo, gansos, y un caballo.
Lindo el perrito |
Fue divertido darle de
comer a este último, quien apreciaba unos frutitos que caían de un árbol
cercano y que se servía directamente de nuestras manos.
Mansito el caballo |
Los chicos corrieron y
jugaron a más no poder. Los grandes charlamos y compartimos un momento hermoso.
Nos quedamos hasta
bien tarde, ya que también cenamos allí con todo el grupo.
Uno de los michis |
Esos paisajes ♥. Va cayendo el sol en el campo |
Volvimos cansados pero
felices.
¡Bravo por estas
escapadas que hacen bien al alma!