¿Se acuerdan de la “carta de los deseos 2016”?
A fines de octubre del año pasado hice este ejercicio, y lo compartí con
ustedes. Pueden leer el post aquí.
¿En qué consistió? Pues en escribir una carta
para mí misma a ser abierta el 31/12/2016 (dentro de dos días! Que rápido pasó
el tiempo!). En ella había escrito con el mayor detalle posible aquellas cosas
que quería ver cumplidas durante el año. Escribiendo en presente como si eso ya
se hubiera dado, agradeciendo por las bendiciones obtenidas.
Fue un ejercicio muy grato y que me dio
felicidad, porque de alguna manera fue crear con el pensamiento los sucesos que
quería, proyectar un gran año.
Debo decir que si bien no recuerdo todo lo que
allí había puesto, algunas cosas las tengo presentes y la mayor parte se han
cumplido. En el caso del que había sido mi principal deseo, la llegada del
bebé, no tuve suerte, pero en el resto la verdad es que casi todo se ha
dado. Así que puedo darme por satisfecha
porque realmente ha traído cosas buenas.
Y como he decidido concentrarme en lo que sí hay en lugar de en lo que falta,
para mí ha sido un éxito.
En mis planes estaba repetir este ejercicio
para el 2017, y ayer lo he llevado a cabo. Nuevamente compré un sobre bonito, e
imprimí unas ilustraciones preciosas para hacer de fondo de mis hojas. Fui a un
bar después del trabajo, y tranquila fui escribiendo mi carta. Fue una especie
de ritual, ya que mientras dejaba los trazos sobre el papel iba delineando lo
que quiero para el nuevo año.
Esta vez hablé de un tiempo de crecimiento, de
haber aprendido a soltar y a dejar fluir las cosas. De haber dejado actuar al
Universo, de haber disfrutado con lo que teníamos. De prosperidad y abundancia,
de amor a montones, de compartir, de viajar y descubrir nuevos lugares, de
maravillarme con la vida, de tranquilidad laboral, de poner lindo el hogar, de
compartir con la gente que uno quiere, de salud perfecta, de felicidad, de
sorprenderse, de hacer algo por los demás, de sentirse uno con el Universo, de
confianza, de bendiciones.
En algunas cosas tal vez fui menos precisa o
descriptiva que en la carta anterior. Pero ha sido deliberado, ya que he pedido
que llegue lo que tenga que llegar. He pedido aceptación por lo que es en cada
momento. He querido soltar un poco algunas cosas, quitarles el foco y dejar que
el Universo actúe. Si algo tiene que ser para mi en un momento, va a encontrar
su camino. Creo que esto es lo más importante que pienso hacer este año,
dejarme llevar y estar bien con lo que traiga. No ponerme mal por lo que no
hay, sino estar llena de gratitud por lo que si tengo. Y eso es mucho.
He delineado un gran año. Confío en que así
será.
¿Y ustedes? ¿Cómo imaginan su 2017? ¿Qué quieren
que les traiga?
¿Han hecho este ejercicio alguna vez? ¿Les
parece interesante? ¿Se animarían a hacerlo?