Tea party - Alice in wonderland

Cuando mi novio me preguntó si tenía ganas de ir a un evento llamado “Tea Party – Alice in wonderland” le dije que si sin dudarlo. Enseguida me ocupé de hacer las reservas para garantizar nuestra participación en lo que prometía ser una degustación de cosas ricas dentro de un contexto de cuento. Y el evento no me defraudó, pasamos el domingo una tarde absolutamente maravillosa.

Se realizó en un salón que ni siquiera quedaba muy lejos de casa, y en el que seríamos unas cien personas. Llegando nomás al lugar nos recibió el Sombrerero Loco, quien nos indicó que teníamos nuestros lugares en una de las mesitas del fondo. Para llegar había primero que atravesar una especie de tienda en donde colgaban cartas de picas y corazones, llaves preciosamente trabajadas, y algunas flores.

La mesa era una locura, todo divinamente preparado, cuidado hasta el último detalle. Todo era extremadamente visual. Me encantó que teníamos tarjetitas con nuestros nombres esperándonos sobre el plato. Sobre la mesa una serie de delicias (todo realmente exquisito) que iban acorde a la ocasión. Los muffins venían en un envoltorio con la leyenda “eat me”, y cartelitos de “drink me” sobresalían de los vasos. Pequeñas botellitas de líquido azul reposaban en la mesa (no me atreví a probar ninguna, a ver si me reducía o crecía en tamaño!!). Sobre la mesa habian esparcido de una manera que me pareció de lo mas linda confites de colores (M&M, asi que eran riquisimos) y chocolates en forma de coronas, teteras, conejos, etc.

El salón también estaba muy bonito decorado, con cartas que adornaban unos grandes telones rojos y negros. En una pantalla grande se reproducía la película, en su versión de dibujitos animados de Disney. El ambiente muy alegre y familiar, con gente de todas las edades. Algunas personas se habían animado incluso a caracterizarse como los personajes del cuento, lo cual hacía todo más fantástico.

La puesta en escena también linda y divertida. Mientras tomábamos el té pasó corriendo el Conejo Relojero (al grito de “es tarde, es tarde)”, y Alicia que lo perseguía atrás.

Enseguida hizo su entrada la Reina de Corazones. Me reí muchísimo con su personaje, que a cada rato se pronunciaba en alto al grito de “que le corten la cabeza”. El Sombrerero también se paseaba por la mesas haciendo caras, sentándose con la gente.

Hubo lugar para los sorteos. Sacaron unos cuantos numeritos, y me quedé con las ganas porque el mío nunca salió. Entre los premios había tacitas y teteras, algunos llaveros, y unas bellas llaves trabajadas.

Llegado el momento, cantamos el “no cumpleaños” cuando hizo su aparición una torta bellamente decorada. Creo que nadie llegó a probarla, porque ya habíamos comido demasiado durante toda la tarde. Es que era todo rico, todo invitaba a servirse un poco, a probarlo, a olvidarse de la dieta y saborear cada momento.

Fue una tarde maravillosa, la disfruté con todos los sentidos. Les dejo unas fotos para que observen las cositas ricas (si, ya se, son una tentación terrible) y a algunos de los personajes que nos acompañaron ese día.

¿asistieron alguna vez a una tarde de cuento? ¿algún evento similar?