Un día "ni"

Hoy me venía sintiendo en un dia de “esos”. Uno en que no puedo decir que estoy mal, tampoco que estoy bien, uno en que me siento “ni”. Motivos para ello ninguno, pero simplemente me levanté así, con pocas ganas, con el ánimo un poco bajo.

Me había traído comida para el almuerzo como suelo hacerlo. Algo sanito para seguir con la dieta (y de alguna manera compensar las porciones de pizza de ayer, la torta del cumple de mi hermano, y demás deslices que trajo la víspera). Pero en vez de ir al comedor como también acostumbro y buscar mi comida, llegada la hora me fui a comprar un sándwich de bondiola con queso y fui rumbo al río.

El Río de la Plata está acá nomás, a dos cuadritas del trabajo. Una zona que han puesto muy linda, con el pasto bien cortado, y bancos para sentarse. La verdad es que no voy casi nunca. Pero hoy me dieron ganas de estar esa horita “by my own”, escuchando algo de música en el mp3, sentada en el pasto y con la vista perdida en el horizonte.

Para compensar un poco los días grises hoy el sol brillaba de una manera preciosa. Sentada ahí, con sus rayos acariciando suavemente mi cara, me sentí bien. Respiré hondo unas cuantas veces, como queriendo absorber la brisa, el olorcito del pasto. Llenándome un poco de ondas positivas.

Y así pasó la hora, y tuve que volver a la oficina. Otra vez frente a la computadora, pero sintiéndome mejor, saliendo un poco del “ni”, preparada para pasar la tarde. Con un cafecito en la mano (que no debería estar tomando porque es el tercero del día y voy a terminar con un agujero en el estómago si sigo así) pero lista para seguir la jornada.

¡Lo que hace un poquito de aire y sol!

¿que hacen ustedes cuando se sienten “ni” y deben seguir con la rutina?