Es sabido que Paris es
la ciudad del amor. Y también que muchos enamorados dejan colgados en los
puentes sus candados como símbolo de amor eterno.
A mí eso siempre me
pareció muy romántico así que antes de salir de Buenos Aires compré un candado
en una ferretería y lo puse en la valija.
El día en que íbamos a
buscar el “Pont Neuf” (que es donde sabíamos que se suelen poner) coincidió con
el día en que decidimos subir a la torre Eiffel. De hecho, esta fue la primera
actividad del día.
Compramos la entrada y
cuando pasamos por el scanner del control de seguridad el vigilante me dice que
le muestre el candado que llevaba en la mochila. Me lo dijo en inglés y tardé
un rato en entender que quería que le muestre. Mi primera confusión fue pensar
que “padlock” era el palo selfie. Yo se lo mostraba y él negaba. Ahora lo
pienso y me río.
Se aclaró el tema y
cuando recordé que tenía el candado en la mochila me quería morir. En otro
inglés chapucero le trataba de decir que no importaba, que lo tirara a la
basura. El señor se pasó un rato divertido con nosotros porque iba leyendo los
nombres que habíamos puesto con marcador, nos miraba y sonreía. Yo seguía
insistiendo en que lo tirara a la basura.
Resulta que el
vigilante era buena onda, y si bien no nos dejó subir con el candado porque eso
está prohibido, nos indicó que saliéramos del recinto, que lo escondiéramos
entre las plantas que forman parte de los Campos de Marte, y que al salir lo buscáramos.
Debo decir que también acá se produjo confusión, primero pensé que nos quería
indicar que lo metiéramos en un locker y yo no entendía dónde estaban. Evidentemente
tengo que refrescar mi inglés.
El tema es que
escondimos nuestro candado entre las plantas, subimos a la torre y disfrutamos de
unas bellísimas vistas (les dejo fotos desde las alturas), y luego pudimos
recuperarlo.
Nos dirigimos finalmente
al puente, y cuando íbamos llegando nos imaginábamos poniéndolo a las apuradas
y sin que fuera evidente. Tenía entendido que en un momento se había querido
prohibir que la gente dejara más candados por el peso de los mismos. Cuando
llegamos ahí sin embargo nos relajamos al ver que los oportunistas de siempre
tenían instalado un comercio de candados y a viva voz los ofrecían.
Nos dimos entonces
nuestro tiempo y nos sacamos fotos. Ahí quedó nuestro símbolo de amor eterno
enganchado en el puente.
El marcador mucho no se notaba así que edité los nombres para que me quede de recuerdo. El del hilo rojo es nuestro. |
¡Oh la la, que viva el
amor!
Amor eterno, eso dicen que ocurre con los candados, pero en algunos lugares los están quitando, las llaves las tiran al rio y el peso de los candados destroza los monumentos. Veremos quien gana. Un abrazo
ResponderEliminarYo había escuchado que los estaban quitando.. pero al llegar a Paris los encontré por todos lados, y en especial en ese puente.
EliminarRealmente pensábamos que iba a haber gente vigilando o advirtiendo de que no se pusieran, pero en vez de eso había gente vendiendo candados para que uno se sume a esa movida. El nuestro había viajado más de 10.000 km asi que ahí lo dejamos enganchadito en el puente..
Ohhhhh, y ahí quedó para la posteridad, qué bonito!! Me ha hecho gracia lo del vigilante de la puerta. Por lo menos tenía buen rollo. De todas formas, sí que impresiona un poco ver tanto peso en el puente. Ichhhh. Besotes!!!
ResponderEliminarSi, los puentes en algún momento va a mostrar signos de deterioro por el peso de tanto candado.. es un poco inevitable.. pero mientras tanto ahí quedó el mio..
EliminarLa verdad es que se ven por todos lados en Paris..
Lo del vigilante fue gracioso.. sobre todo por la confusión que surgía por el idioma.. hasta que nos entendimos! Y por suerte se copó y nos dejó salir para esconderlo entre las plantas..
Debo decir que hay un gran cambio señora: Has dejado que tu verdadero nombre tomara protagonismo sobre tu seudonimo y que en muchas fotos te has dejado ver....todo un cambio para su blog y me alegro mucho, indica eso que sos sinceramente feliz? me parece que si!!! (Estela esta enamorada, Estela esta enamorada, tiene novio, tiene novio...!! jejejeje)
ResponderEliminarJaja.. mi nombre muchas veces apareció por aquí. Y de hecho en el primer post del blog que sirve de presentación ahí lo había puesto. Lo reemplacé luego por el seudónimo porque mi espacio sigue teniendo mucho de secreto para mi entorno de la vida real.. El que nunca había mencionado es el nombre de mi media naranja..
EliminarEn fotos no me muestro mucho pero cada tanto también aparezco..