Barceloneta

 Como les contaba en el post anterior, para el almuerzo del primer día nos encaminamos hacia la Barceloneta.

Este barrio tiene como uno de sus principales atractivos la playa. Al haber ido a fines de verano y como ese día era domingo había bastante gente tomando sol o disfrutando de un chapuzón en el mar. Hacía calor así que estaba ideal para eso.

Nosotros nos contentamos con mirarlo un poco de lejos y caminar por ahí.

Las calles cercanas son bastante particulares, ya que son estrechas y sus construcciones son bastante antiguas. Más bien sencillas, edificios de tres o cuatro pisos en los que lo que me llamó la atención era la ropa colgada hacia afuera.

Los pequeños balcones tenían adosada una estructura de metal que permitía dejar allí la ropa aireándose. No voy a decir que esta estética me guste mucho, más bien daba aspecto de algo medio dejado y precario, pero si debo decir que era llamativo de todos modos. Supongo que esas viviendas serán pequeñas y es una forma que habrán encontrado para no perder espacio interior en estos menesteres.  O simple costumbre, vaya uno a saber.

Algo fresquito por el calor.

Allí es que hicimos una breve pausa para comer algo y reponer nuestros pies de la caminata de la mañana. No por mucho tiempo ya que enseguida nos pusimos en movimiento para continuar con nuestras aventuras. 

Tapas. Para elegir!