Hace frío, pero igual se sale

 Estos días están bien frescos por Buenos Aires. De esos en que no hay abrigo que baste para entrar en calor. Y encima ¿pueden creer que se nos estropeó la estufa justo ahora? Desde hace unos días que no funciona, y encima el gasista no nos contesta los mensajes. Uf! A abrigarse bien, no queda otra. Dormir bien juntitos y abrazados (con el michi arriba nuestro, porque él también quiere un poco de calor), a tomar sopitas, cafecitos, y cualquier cosa que ayude a sentirse mejor.

Que graciosa la cara de este gato...

Y este ni hablar jaja

De todos modos han sido también días de juntadas y salidas varias. El viernes pasado festejamos el día del amigo en Argentina, y fuimos a una reunión de lo más linda en la casa de una de mis amigas. Con un guiso de lentejas casero que era un manjar. Éramos como veinte, ¡así que imaginen la olla que se usó! Lo pasamos super bien.

El sábado fuimos a otra juntada, esta vez con asado y cerveza. Otro día de trasnochar y reírnos mucho. ¡Qué bien que hacen esos encuentros!

El domingo si que me dediqué a no hacer nada. Dormir hasta tarde, luego una siesta. Es que bajo las mantas se estaba bárbaro. Un poco de lectura y tele, en un día de lo más fiaca. A la noche si tomamos coraje y salimos, ya que habíamos sido invitados a ver un espectáculo de flamenco. Estuvo interesante, algo diferente.

Estos días me encuentran con los preparativos del festejo de mi cumple (es este jueves). Encargando cosas ricas y ultimando detalles. ¡Luego les cuento que tal salió todo!