Noviembre me agarró
ocupadísima. En la oficina estamos a mil. Muchas cosas han surgido y otras
están por darse (movidas empresarias varias que incluyen adquisición de
empresas y mayores participaciones en otras, con la consiguiente tarea de
parametrizar e interiorizarse en funcionamiento de estas, en adaptar procesos y
archivos, etc). Como se imaginaran eso me deja menos tiempo para ponerme a
actualizar el blog o pasear por el ciberespacio, asi que cuando tengo un ratito
trato de darme una vuelta por estos pagos para saludar.
Mi vida personal muy
bien y también cargada de actividades. El fin de semana que pasó pude darme una
vuelta por “La noche de los museos”, evento que ya lleva algunos años
realizándose en la ciudad. En esta ocasión nos fuimos a chusmear la ESMA, donde
funcionó un centro clandestino de detención durante la última dictadura
militar. Estuvo interesante, había unas cuantas muestras relacionadas con los
derechos humanos y con las abuelas de Plaza de Mayo. Un espacio para
reflexionar, y del cual nos quedó bastante por seguir recorriendo.
El domingo me encontré
haciendo una actividad diferente y que no tenía planeada. Una amiga tiene un
hijito en jardín de infantes y me invitó al acto de fin de año. Su pedido fue
lindo aunque el contexto que le dio inicio no lo era tanto. Ella está separada
del padre del nene y él no quería sentarse adelante junto a ella en el lugar
designado para los padres. Pelea va y pelea viene indicaba que no quería ni siquiera
pasar ese rato ahí sentado. Luego de llantos varios de parte de mi amiga por la
situación y porque sentía que le habían arruinado el momento del chico, logré
convencerla para que vaya igual (se le cruzó por la cabeza no ir al acto, por
suerte luego accedió) y tranquilizarla un poco.
Domador de leones enojado por haber perdido el sombrero |
Así fue como terminé
en el lugar que debió ser del padre, una privilegiada segunda fila con vista
genial hacia el escenario. Y debo decir que disfruté el acto, los niñitos
actuando me hicieron reír mucho. Aproveché la ocasión para sacar unas cuantas
fotos. Hoy les comparto apenas algunas, ya que no tuve tiempo de procesar
otras. Prometo luego mostrarles más, ya que eran unos actores adorables.
El acto comenzó con un
saludo de parte de los más chiquitos, apenas bebés. Claro que ellos no hicieron
mucho más que estar vestidos con unas remeras de colores vivos mientras las
profes los mostraban y hacían mover un poquito al ritmo de la música. Lindos
ellos, mirando con curiosidad las luces del escenario y sin entender demasiado.
Pequeña monita |
Le tocó luego el turno
a los de salita de un año, que ya caminaban y estaban vestidos de monitos.
Super graciosos con sus disfraces. Otros estaban de elefantes y jugaban con
pelotas.
Una linda payasita |
Unos mas grandecitos
hicieron de payasos y otros de magos.
Payaso requete tierno |
Le siguieron unos
domadores de leones. Uno me hizo reír mucho porque se le salió el sombrero y
eso lo hizo enojar, así que estuvo de brazos cruzados el resto de su acto.
Las nenas con vestidos
de bailarina estaban preciosas, tan femeninas ellas con sus pocos añitos,
saltando y haciendo poses de baile que eran una ternura.
Elefantito con pelota |
Para finalizar los
abuelos vestidos de payaso cantaron y bailaron, dando un cierre muy divertido a
la función.
Un lindo momento sin
duda el ver la inocencia de los chicos, la ilusión con que actuaban, los padres
emocionados. Era un momento de fiesta y que no había que perderse.
Cuando los niños hacen sus espectáculos da mucha ternura, hace poc (bueno, casi medio año) fue el desfile de primavera de mi sobrinita y estuvo bien lindo
ResponderEliminarQue bueno que fueron
Saludos!
Si, resultó de lo mas tierno. Hermoso de ver. Por suerte pude convencer a mi amiga de que no se perdiera este momento importante para su hijo.
Eliminarbeso
Bien, espero que el trabajo no te agobie y puedas disfrutar de eventos infantiles o paseos tranquilos. Abrazos
ResponderEliminarGracias Ester. Con bastante trabajo pero igual trato de hacer cosas que me gusten. beso
EliminarQue pasada de fotos! *-* Son adorables!!
ResponderEliminarMe alegra que te gusten. divinos los chiquillos.
EliminarFelicidades, las fotos están genial!
ResponderEliminarSaludos y buen día.
Gracias, me alegra que te gusten. beso
EliminarEstela que pena que los padres separados no sean capaces de dejar a un lado las diferencias para compartir un momento con su hijo.
ResponderEliminarPor lo demás las fotos geniales...me encantan las caras de los niños, son muy expresivos y tan transparentes...
Un abrazo
Realmente es una pena que pasen esas cosas. Como que no pueden superar sus diferencias y los que terminan pagandola son los niños. Por ejemplo en las fotos de ese día el nene de mi amiga sale en la mayoría muy serio, hasta te diría que triste. Y para no estarlo, si la madre había estado llorando a mares un rato antes, ellos lo perciben ese malestar.
EliminarPara mi fue un placer sacar esas fotos de los peques actuando..
beso